¿Te gustaría poder tener una bola de pelo a la que poder abrazar como lo harías con un gato o un perro? Si has respondido que sí, seguro que estás deseando pasar unos cuantos años de tu vida con un conejo gigante continental, ¿verdad?
Este es un animal que, si bien y lamentablemente vive menos años que otras razas, es cariñoso como el que más.
Origen e historia
Nuestro protagonista es una raza de conejos que desciende del antiguo gigante flamenco, una raza que se originó en Gante, Bélgica. De este último se sabe que se crió cruzando el Steenkoijn, llamado conejo de piedra porque se decía que pesaba tanto como una piedra belga -unos 3,85kg-, y con el patagónico, que es una raza europea que a día de hoy está extinta.
El gigante flamenco y el continental se enviaron a los Estados Unidos, desde Gran Bretaña Hacia finales del siglo XIX con el fin de mejorar el tamaño de los animales que se criaban por su carne. Al poco de llegar a América, las razas gigantes empezaron a aparecer en distintas exposiciones de ganado.
Características físicas
Es una de las razas más grandes, además de antiguas ya que se empezó a extender hacia mediados del siglo XVI. Es un animal que puede pesar una media de 6kg (el peso máximo es de 10kg 😉 ). Su cuerpo es musculoso cubierto por un pelo que puede ser blanco, negro, gris acero, gris claro o arenoso. La cabeza es grande y ancha, especialmente en el macho. Los ojos son redondos, y las orejas largas y erguidas.
Tiene una esperanza de vida de 5 a 7 años.
Comportamiento
El conejo gigante continental es un peludo muy cariñoso y sociable, al que le encanta ser acariciado y atendido con mimo. Lo único que tienes que saber que no le gusta demasiado que lo cojan en brazos, pero seguro que si le das un poco de zanahoria poco a poco irá acotumbrándose.
¿Cuáles son sus cuidados?
Jaula
Más que jaula, lo que se recomienda es tenerlo o en un recinto o, preferiblemente, suelto por la casa. Si además tiene un poco de jardín donde pueda estirar sus patas, tomar el sol y divertirse estando al aire libre, mejor que mejor.
Alimentación
Al gigante continental, al igual que a todos los conejos que vivan con familias humanas, hay que darle heno, verduras frescas y pienso de alta calidad. Unas dos veces por semana también le podremos dar fruta fresca.
Pelaje
Al tenerlo corto, bastará con cepillarlo una vez al día. No es necesario bañarlo. Él dedica buena parte de su tiempo a mantener su pelo sano y brillante 🙂 .
Uñas y dientes
Para estar bien, es necesario acostumbrarlo a la rutina del corte de uñas desde casi el primer día que llega a casa. Para evitar problemas, la primera vez lo llevaremos al veterinario para que veamos cómo se hace.
Si hablamos de los dientes, le daremos una madera para roer que encontraremos a la venta en tiendas de animales.
¿Dónde comprar?
Puedes conseguirlo en una tienda de animales. El precio es de unos 20 euros.
¿Qué te ha parecido este peludo?